La terapia cognitiva

A continuación vamos a hablar de la terapia cognitiva, una terapia psicológica que se centra en el hecho de que los problemas de las personas están basados en la dificultad o las complicaciones que surgen para poder interpretar los hechos que ocurren a su alrededor basándonos en que dicha interpretación se basa en las experiencias pasadas.

La terapia cognitiva

La interpretación de la realidad

Muchas veces, los problemas psicológicos se fundamentan en la dificultad para poder valorar e interpretar la realidad que allá nuestro alrededor. Esto hace que muchas veces existan determinados problemas que para nosotros se pueden convertir en un mundo, pero que en realidad para nada son reales.

Por ejemplo, un caso en el que se puede tratar al paciente con terapia cognitiva es cuando existe un descontrol de la ansiedad, que como nuestros lectores ya sabrán, se trata de un problema que nos impide afrontar la realidad tal y como es, creando unos picos de ansiedad con síntomas que pueden llegar a ser muy desagradables. Otro ejemplo igualmente importante es en el caso de la existencia de depresión.

El nacimiento de la terapia cognitiva

La terapia cognitiva cuenta ya con bastantes años a sus espaldas y unos resultados bastante positivos. Nació a lo largo de los años 50 y se divide en varias técnicas que dependerán de cada caso y uso.

Fue entonces cuando comenzó a desarrollarse esta terapia que se fundamentaba en el modo en el que asimilamos nuestro entorno, y en este sentido hablamos de un proceso muy amplio debido a que existen tantas interpretaciones como personas, es decir, la terapia cognitiva busca adaptarse a cada uno de los pacientes de forma totalmente individualizada.

Las razones de nuestra interpretación

El hecho de que cada persona intérprete de una forma distinta los sucesos que acontecen a su alrededor se debe a que en nuestro ser está completamente formado y basado en las experiencias que hemos vivido desde el momento en el que nacimos hasta el presente.

Por norma general, la mayor parte de estos sucesos se pueden afrontar de forma positiva y no llegan a crear un trastorno de la realidad excesivamente destacado, pero a menudo también nos encontramos con el hecho de sucesos de mayor importancia o incluso los que podríamos considerar normales pero que no se han interpretado de la forma adecuada.

Esto hace que tengamos una visión de la realidad distinta y generalmente errónea que hace que nuestro día a día se pueda incluso llegar a convertir en una pesadilla.

En esencia, los problemas emocionales que podamos tener se basan en el aprendizaje que hemos vivido hasta la fecha.

Los beneficios de la terapia cognitiva

En cuanto a los beneficios de la terapia cognitiva, debemos tener en cuenta que se trata de una disciplina científica, es decir, no estamos hablando de técnicas que estén centradas en opiniones creativas ni por supuesto magias absurdas, sino que existen suficientes pruebas y estudios que demuestran su gran efectividad a la hora de tratar al paciente.

Además de la ansiedad y la depresión, la terapia cognitiva también puede ser una gran ayuda especialmente para otros problemas como puede ser la agorafobia y los distintos miedos que podamos padecer.

Deja una respuesta

Tu dirección de correo electrónico no será publicada. Los campos obligatorios están marcados con *

Subir